Igual Mañana tengo que cocinar

Publicada en la edición Nº15 de la revista D de El Dínamo

Después de más de tres años del pollo flaco que ha sido este gobierno, uno esperaría que los candidatos a la presidencia hayan ofrecido, a estas alturas del partido, detalles precisos del cordero bien alimentado que nos traerá esperanza a la mesa del futuro cercano. Pero no ha sido así. Según el CEP el desapego del los electores crece y nos llenamos otra vez de votantes que no les importa quién salga elegido porque “igual mañana tengo que trabajar” o como diría este servidor “igual mañana tengo que cocinar”.

Preocupado de la situación y en busca de la protección de mis intereses, hice un análisis gepeté de los programas de gobierno y pude comprobar que en todos se incluye la palabra alimentación, pero no sabor, comida, restaurant o fiesta. Esto revela en parte que la misión de los candidatos es que existan suficientes calorías en la boca de la población, probablemente no por interés en el prójimo sino porque todo político que se precia sabe que su pescuezo corre peligro cuando al pueblo le falta qué comer. Cayeron zares y reyes por falta de pan. 

Antes de elaborar sobre las opciones es prudente separar el trigo de la paja. MEO, Mayne Nichols y Artés importan un pepino, casi nada, son como máximo la pasa de la empanada y de puro ingenuos los seguimos soportando. Por su parte Parisi importa un maní, pero da susto porque a mucha gente le gusta el maní, demasiada al parecer. Así las cosas y como hay que votar obligatoriamente decidí informarme.

La candidata Jara que camina como comunista, habla como comunista también cocina como comunista. La vi en Youtube preparando una carne en la olla a presión llamada carne a las 40 horas y papas doradas. Hasta ahí lograba engañar. El problema se reveló al llegar el postre: una papilla de huesillo con mote encima. Comida inspirada en los engrudos del gulag. Véalo usted mismo y no le quedarán dudas que el comunismo puede empeorar hasta el mismísimo mote con huesillos. Ademas, la señora tiene en su programa la propuesta de una Red Nacional de Bancos de Alimentos Municipales, que en caso de hacerse realidad va a terminar igual que el experimento de las farmacias populares. Paga Moya y las ferias libres de todos Chile. No gracias.

Del candidato Kaiser sólo puedo reportar que me recuerda a la escalopa Kaiser. Cae pesada y es para comerla durante la adolescencia en que uno se traga cualquier cosa. Al parecer ha sido tan meteórica su alza en las encuestas que no ha alcanzado a visitar algún programa donde tenga que pelar un tomate. Imagino que para él los asuntos de la mesa y la cocina son cosas de mujeres. Mal que mal ante la provocación de una simple feminazi se dio el lujo de escribir que “ya casi no existen mujeres que quieran quedarse en la casa para servir y dar placer al marido”. Como ahora el hombre es casado, imagino que no cocina ni huevos duros. Así sus habilidades culinarias se mantienen en el misterio, tal como sus habilidades humanas.

En la internet, donde más iba a ser, encontré un video del candidato Kast en la cocina. Se veía que sabe cocinar, y que sabe cocinar mal. Hizo un plato que le enseño su mamá llamado Margarita. La receta incluye pan de molde dorado con mantequilla, luego unas rodajas de tomate, cebolla cruda y huevo frito. No salía cuando le puso sal o en realidad no le puso. En la pantalla el menjunje de caliente y frío se veía insípido como el cocinero. Luego confesó que su mamá les daba mantequilla con pan y no pan con mantequilla, lo que me dio algo de confianza. Eso sí, en el video se ve claramente que el cuchillo para cortar los tomates se parece muchísimo a un corvo. Hasta ahí no más llegamos. 

A Matthei la vi preparar una mayonesa con ajo que, aunque la mayonesa era de paquete, me dejo intrigado. También la vi comerse un completo y una cazuela. No vi mucha originalidad pero si substancia. También la vi preparar una mousse de palta con salmón ahumado. Buena combinación. La mousse la hizo con palta, mayo, yoghurt, caldo de pollo y gelatina para el cuaje. Seguí hurgando algo decepcionado y pensé que “igual mañana tendré que cocinar” hasta que finalmente la vi zamparse con gusto unos erizos al matico que me dieron esperanza en el futuro, que es lo que Chile necesita por sacos. Algo es algo.

Receta para el domingo

El cronista y cocinero español Xavier Domingo, defendía sus posiciones políticas comiendo “el más electoral de los platos, la más democrática de las legumbres. Lentejas (que comes o dejas). Él nos regaló esta receta de lentejas que casi tan simple como hacerle la raya al voto.

Las pondremos en remojo. Las haremos hervir con una cebolla picada de clavos de olor, sal y pimienta, dos hojas de laurel y una cabeza de ajos. Añadiremos una zanahoria cortada en rodajas.

Aparte, y poniéndolo antes en el fuego, en agua pura, coceremos hasta punto de pura mermelada uno o dos codillos de cerdo.

Y a vivir, que no es votar.